GOYA
+ BUÑUEL, ESTOY CANSADO DE VER MARAVILLAS,… ZARAGOZA
En 1900 nació Luis Buñuel
Portolés en Calanda, pueblo de la provincia de Teruel. Su padre, Leonardo,
regresó de Cuba con dinero del negocio de la ferretería, se instaló en Calanda
y se casó con María Portolés. La familia
se trasladó a Zaragoza, donde el niño Luis aprendió las primeras letras en los
Corazonistas y luego con los Jesuitas, que le enseñaron la Doctrina Cristiana.
Su madre era muy devota y vestía al niño con medallas de la Virgen y
seguramente le llevaba a rezar y a las
procesiones de la festividad de la Virgen del Pilar, en cuyo templo tendría el
primer contacto con Goya, las grandiosas cúpulas sin restaurar, se presentaban
ante sus ojos, El Coreto y la Regina Martyrum iluminarían su mente
junto con la de González Velázquez y las de los Bayeu. Los Gigantes y Cabezudos de las Fiestas no
dejaron de aparecer en su filmografía, al igual que los tambores de
Calanda.
En 1926, estando en París estudiando Cinegrafía con Jean Epstein,
- que filmaba en ese momento Mauprat, - le encargan desde Zaragoza,
un film sobre su paisano Francisco de Goya, la Junta del Centenario de la
muerte del pintor en 1828. Al año siguiente 1927, le ofrecen trabajar como Assistant metteur en scene con Alex Nalpas, quien estaba haciendo un film sobre Josèphine Baker,
La Sirène des tropiques, la primera
película sobre esta artista.
Luis Buñuel había estudiado en Madrid desde 1917, primero inicia la carrera de Ingeniero Agrónomo y luego
estudia Filosofía y Letras, licenciándose en Historia en 1924. Vive en la
Residencia de Estudiantes, donde conoce a Lorca, Dalí, Pepín Bello,….caldo de
cultivo del Dadaísmo y Surrealismo español. En 1925 Louis Aragón dio una
conferencia sobre estos temas en la Residencia de Estudiantes. En Madrid hay muchos Goyas que ver, este
pintor desarrolló toda su labor en la capital de España. Su obra en el Museo
del Prado, la Academia de san Fernando y san Antonio de La Florida, las vería
junto a Dalí, que era un gran admirador
del pintor aragonés y de la pintura mística española.
Para realizar el Guión
solicitado, lo primero que hace es documentarse sobre su paisano y adquiere dos
libros franceses sobre Goya, las
primeras biografías sobre el pintor de Fuendetodos, escritas por Mátheron y
Charles Yriarte, luego solicita imágenes
de la obra de Goya a su amigo y librero madrileño León Sánchez. Las
obras solicitadas son las siguientes:
Majas en el balcón, La
Pradera de San Isidro, La Gallina ciega, Zancos, dos o tres fotos de
Procesiones, La Inquisición, Retrato de Goya de Vicente López, Retratos de
María Luisa y de Carlos IV, Godoy, Una maja, Dos Duquesas de Alba, Retrato de
Moratín, Los Bandidos, Dos o tres
aguafuertes, Retrato de un fraile, Capea de pueblo, La Merienda, y uno o dos a
su capricho, pero siempre de anécdota, con arquitecturas, si es
posible. Me los envía a Costa, 6, Zaragoza.
Las biografías de Mátheron e Yriarte le vienen muy bien a Buñuel por la visión
romántica que hacen estos historiadores
franceses sobre Goya. Buñuel se planteó el Guión girando mas sobre la Duquesa de Alba que sobre
Goya, la cual aparece al principio en Zaragoza casada mientras que Goya está
estudiando en el taller del maestro Luzán.
El cineasta juega con los tiempos, no le interesa la cronología, no
quiere hacer un documental. En 1775 la Duquesa se casa con José Alvarez de Toledo, XI Marqués de Villafranca del Bierzo y XV Duque de Medina Sidonia y Goya para
esas fechas, se encuentra en Madrid, casado y trabajando en la Fábrica de Tapices. Hace
un recordatorio del niño Francisco pintando paredes encaladas en el pueblo de Fuendetodos
y un fraile lo descubre y lo trae a Zaragoza, a estudiar pintura. El desarrollo del guión continúa en la Corte
de Madrid, donde Godoy, en su despacho, acosa a bellas damas, a las cuales,
pellizca. La siguiente escena transcurre
en el Palacio de Aranjuez, donde el Rey y la Reina María Luisa están viviendo,
ésta acompañada por la Duquesa de Alba. Llega Godoy y se va de caza con el Rey y matan
un ciervo, y el Rey se queda con la cornamenta en la mano mientras el
Valido vuelve a Palacio, a tener amoríos
con la Reina. Mientras están juntos, los
ve la Duquesa de Alba, cuando está a punto de salir para Madrid; es el mes de
mayo, y así podrá participar en las festividades de La Pradera de San Isidro. Se suceden escenas festivas, el juego de la gallina ciega, los zancos,…los
majos y las majas bailan y beben, hay amoríos y despechos entre la maja Primorosa y la Duquesa, por Goya, que
vuelve a aparecer en escena con unos dibujos comprometedores. En el
acto siguiente aparece la
Duquesa en su jardín, en primavera, con ansiedades sensuales, y mientras, Goya la visita para pintarla. La
descripción buñuelesca es edulcorada en amoríos, tanto la Duquesa como Goya
reciben unas noticias, ella de Godoy y él de Primorosa, que cita a Goya por la noche, y que tiene que ir donde
ella vive. El amante despechado de ésta le tiende una emboscada, Goya se
defiende con la espada y hay heridos, entre ellos el pintor, que es detenido y
encarcelado, por sus dibujos. Durante la
noche, Primorosa sueña y tiene
pesadillas, ve a Goya ahorcado. En esta
escena del guión trata el mundo de los
sueños, el surrealismo está presente. Al día siguiente, Primorosa se entrevista
con la Duquesa, para que use su influencia en la Corte y que liberen a Goya.
Ella se niega. Luego, cuando se
entrevista con Godoy, le solicita la liberación del pintor y Godoy accede a
usar su influencia con la Inquisición, pero en ese momento, le exige a la
Duquesa que se exilie a Sevilla y que calle sobre su relación amorosa con la
Reina, que ella ha visto en Aranjuez. Un
carruaje se aleja por el campo y Goya malherido, lo alcanza, es la última vez
que ve a la Duquesa de Alba.
La última parte del guión sucede en Burdeos. Goya ya viejo, sordo y malhumorado, se encuentra con su
amigo Moratín y alaba la facilidad pictórica de
Rosarito Weiss, con la que termina su vida recordando su pasado. Buñuel decía que no quería hacer un documental
sobre Goya y hace un guión de la Duquesa y sus amoríos, y Goya apenas pinta en
esta historia. Luego realiza un guión para Paramount en 1938 titulado La
Duquesa de Alba y Goya. No realiza ninguno de estos guiones y los deja
estar.
En el Museo de Bellas Artes
y Museo Goya de Zaragoza, se
celebra una exposición que se titula Goya + Buñuel, los sueños de la razón donde se hace un análisis de las similitudes iconográficas
entre los aragoneses Francisco de Fuendetodos y Luis de Calanda. La exposición
es un derroche de imágenes pictóricas y cinematográficas y se exponen cuadros como El Éxtasis de San Antonio Abad que Goya
copió del original al natural, de Corrado Guiaquinto en Roma, en 1771. Lo
expertizamos como obra del maestro en el libro Goya en el camino, de 1992. Hay un cuadro que hubiese sobresaltado a
Buñuel, una estampa de la Virgen con niño, más del taller del florentino Carlo
Dolci que de Goya, un Baile de Carnaval
que perteneció a la Duquesa de Villahermosa, una pequeña Escena de una escuela elemental, donde un maestro azota a los
alumnos negligentes, la letra con sangre entra. Esta pintura se
puede comparar con la serie Juego de
niños de la Colección Santamarca, actualmente expuesta en Zaragoza, y una
pequeña y gran obra maestra de 1819, Jesús
en el Huerto de los Olivos, que pertenece a las Escuelas Pías de Madrid.
Goya estudió en estas Escuelas Pías en Zaragoza, con el padre Joaquín. Se exponen muchos grabados de
Goya, que a Buñuel no le interesaron para su guión, pero que guardan similitud
con la visión de su mundo cinematográfico, cartas y libros conjuntan esta
muestra.
Con 25.000 pesetas que le envió su madre, María Portolés, a
París, su hijo las utiliza, en vez de en
el guión de Goya, en producir
lo que van a ser sus dos films míticos, Un chien andalou, Un perro andaluz, de 1928 y luego L´Age d´Or (La edad de oro), de 1930, cuando formaba parte del grupo surrealista. Se va a
Estados Unidos y en 1945 se nacionaliza mejicano y este país es el que le da la
oportunidad de desarrollar su gran creación cinematográfica, produciendo cintas
como Gran Casino, con Libertad
Lamarque y Pedro Infante, Los olvidados, Nazarín, Simón del desierto, El ángel exterminador y luego en España, Viridiana, con la gran actriz mejicana, Silvia Pinal. También
trabajaron con él las actrices francesas Jeanne Moreau, en Diario de una camarera y
Caterine Deneuve, en Belle de jour y Tristana.
En 1978 abrimos la Galería de Arte Costa, 3 en Zaragoza y
cuando Luis Buñuel venía a esta ciudad a casa de su familia en Costa, 6, lo
veíamos frecuentemente por la calle Costa y era tal su fama que el artista
brasileño Paolo Houayek, que exponía en nuestra sala, vino emocionado diciendo: ¡ He visto a Buñuel, he visto a Buñuel,… días más tarde, invitamos a Don Luis a ver a Goya
en la Cartuja de Aula Dei y nos contestó:
¡ Ya estoy cansado de ver
maravillas,….
Carlos Barboza Vargas
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