La población de Esquedas, Huesca, fue Señorío de los Condes de
Sobradiel y en la Iglesia de San Gregorio se encuentra un transparente que se
exponía para celebrar la Semana Santa en la Parroquia. Está realizado con
técnica al temple sobre tela de lino y
representa al Padre Eterno o Dios Padre con el Espíritu Santo, como Creador del
Mundo, acompañado de querubines, con mucha similitud temática al realizado por
Paolo Veronese en Venecia en el siglo XVI
y que se encuentra en el Monasterio de El Escorial. El Padre Eterno de Esquedas está ejecutado de
una forma rápida, al primer impulso, como la pintura al fresco. Por las
características de la pincelada, intensidad del color y ejecución, nos
transporta a la impronta de Goya en sus obras al fresco de Alagón, El Coreto y la Regina Martirum de El Pilar. Los Condes de Sobradiel son unos de los
primeros mecenas de Goya, para los que pinta, copiando estampas, el Oratorio de
su Palacio en Zaragoza, cerca de 1770. Pero veamos los antecedentes de cómo Goya se
hace pintor:
A los trece años, Francisco de Goya empieza a
asistir a las clases que imparte José Luzán. Desde 1759 a 1762 aprenderá a su
lado. Francisco dibuja sin descanso en el taller de
Luzán y pinta todo lo que le manda. Infinidad
de estampas, grabados de pintores famosos que colecciona e intercambia su maestro con sus amigos escultores, los
Ramírez, o que le suministran los Pignatelli, los Sástago y todos aquellos
grandes señores.
En el verano o para la vendimia, va a casa de los
abuelos y familiares en Fuendetodos. ¡Qué bien lo pasan en las eras, removiendo y pateando las espigas, qué
calor, qué oro el de los trigos. Es tan brillante bajo el sol como el oro que
coloca su
padre en los retablos por los pueblos. Bajo la dirección de su propio padre, Goya realiza su primera obra, pinta el Armario de las
Reliquias que posee la Iglesia de Fuendetodos…..
“Goya en el camino”
Siempre
se ha escrito que los primeros encargos que tuvo Goya en Zaragoza fueron gracias a la familia del Conde de
Sobradiel, pero no había documentación que reafirmara esta hipótesis hasta que
han aparecido los datos de su hermano, el dorador Tomás Goya habitando en Sobradiel.
Años antes, Ricardo del Arco documenta en 1915 las pinturas del Palacio de Sobradiel en Zaragoza como de la mano de Goya. Ahora podemos
aportar mas datos tales como que en 1769, el Obispo de Huesca visita Esquedas,
y en el Libro de Decretos folio, 527, según investigación del sacerdote D.
Felipe García dueñas, estudiosos de Martincho, dice lo siguiente: Haga presente el Señor Conde de Sobradiel, el gusto y complacencia que, habemos tenido en la visita a la Iglesia al ver su piadoso
celo, y generosa liberalidad, con que se ha servido emplear en beneficio y
decencia de ella de los bienes primiciales,…. Y
solicita a continuación continuar contribuyendo en el beneficio de la Iglesia.
Publicamos un articulo titulado Un Goya en la Iglesia de San Gregorio de Esquedas, en el Heraldo de Aragón el domingo, 15 de diciembre de 1985, dando cuenta de nuestra atribución a Goya de esta pintura del Padre Eterno de Esquedas.
La
población de Esquedas, a catorce kilómetros de Huesca, fue donde nació Joaquín Grasa,
propietario del Bazar La Bola Dorada en Zaragoza,
y es el padre de Aurelio Grasa, fotógrafo y médico. También provienen de
allí los empresarios oscenses y sobrinos de D. Joaquín, los hermanos Albajar Grasa, siendo también familia directa
el escritor Ismael Grasa, todos de una rama común. Para el historiador Pierre Gassier, quien
nos acompañó a Esquedas en uno de sus viajes por Aragón, para estudiar El Padre Eterno, dijo: Es
una obra de Goya trabajando en el taller
de Luzán.
Archivo
Barboza Grasa
No hay comentarios:
Publicar un comentario