El día 16 de abril del año 1915 se publican en la portada del periódico Heraldo de Aragón dos fotografías de Aurelio Grasa, dando cuenta gráfica del acontecimiento fluvial, el desbordamiento del río Ebro a su paso por la ciudad de Zaragoza, con los pies de foto siguientes: LA RIADA. El desbordamiento en la arboleda de Macanaz. Altura de las aguas en el puente de hierro de la línea férrea. Fot. Grasa. (HA 583-584).
En esos años, en episodios de avenida, las aguas del río
anegaban la margen izquierda de la ciudad en su totalidad, por ser su cota algo
menor que la margen derecha y no tener defensa alguna. La arboleda de Macanaz y
sus aledaños, los huertos del meandro y las casetas de baños así como las
pequeñas construcciones, quedaban inundados.
Aurelio Grasa, de 22 años de edad, provisto con su cámara
Goerz de placas de 9 x 12 cms. acudió en
esa ocasión extraordinaria a recorrer toda la margen izquierda del río para dar
cuenta del estado de la cuestión a los lectores del Heraldo. Se acercó al propio
cauce y tomó una fotografía al borde del agua, en la que apreciamos la silueta
de las torres y cúpulas del Pilar entre las ramas de los árboles del río,
mientras toda la superficie de ese umbrío espacio queda bajo las aguas. A continuación, siguió aguas arriba y se
acercó al puente de hierro del ferrocarril, para tomar una impactante imagen de
la gran avenida que discurría bajo su trazado. En esta fotografía que
reproducimos ahora, se aprecia la bella estructura metálica del puente y su moderno
diseño francés, tomada con una perspectiva muy innovadora.
El día 15 de agosto de 2021, se publica en Heraldo de
Aragón, página 14, un artículo titulado El puente ferroviario
de La Almozara cumple 150 años, firmado por Ramón Campo, en el
que da cuenta de la publicación de un libro de Luis Lezaún Martínez de Ubago
titulado Génesis de los enlaces ferroviarios de Zaragoza, editado por la IFC. El artículo va
ilustrado por dos fotografías, una de ellas, actual, de su autor, el
catedrático Luis Lezaún, quien aparece bajo el puente nuevo y mostrando las
bases de las pilastras del puente antiguo, construido en 1871, y la otra de
1918 en la que aparece su tío bisabuelo, Manuel Martínez de Ubago, bajo el
puente. En este caso, el río luce su aspecto normal, con el nivel habitual de
sus aguas.
Queremos felicitar al autor del libro, el profesor Lezaún,
por la publicación de este libro que nos aporta los recuerdos de una época ya
lejana, en la que en Zaragoza se estaba a la última en cuanto a construcción de
infraestructuras civiles. Recordemos que
el Puente metálico entre Brooklyn y Nueva York se construyó entre 1870 y 1883 y
la Torre metálica de Eiffel en París, entre 1887 y 1889, para la inauguración
de la Exposición Universal de 1889.
En nuestro caso, según cuenta
Lezaún, el método de construcción fue similar, utilizando aire
comprimido para su cimentación. En cuanto a los actuales neoyorquinos y
parisinos, ellos aún pueden utilizar y disfrutar de sus reliquias industriales,
pues todavía siguen en pie y en uso y excelente estado de conservación. Los actuales aragoneses no, pues en el siglo
XX construyeron un nuevo puente, precisamente sobre el antiguo de 1871. Sólo se conservan las
bases de sus pilastras y algunas fotografías, entre ellas la de Aurelio Grasa
de 1915, cuando el puente cumplía 44 años de su construcción.
Es absolutamente necesario recordar que las antiguas obras
industriales en Aragón deben conservarse como memoria de aquellos ingenieros, arquitectos y obreros especializados que las construyeron, ya que contribuyeron a la mejora de la
sociedad y nosotros tenemos la obligación de transmitirlo a nuestros descendientes. No debemos insistir en la arraigada costumbre
local de edificar de nuevo sobre lo
antiguo, todavía válido, pues con este método vamos destruyendo la historia de
nuestro territorio.
En este momento pensamos en el precioso puente metálico sobre
el Pantano de La Peña, levantado en los años de construcción del Pantano de La
Peña, en 1913, que todavía sigue en uso, pero en precario estado de
conservación. Debería restaurarse y pintarse como testimonio de esa época de
principios de siglo XX tan activa.
Aurelio Grasa en sus viajes al Pirineo, también lo fotografió….y eso es
otra historia,…..
Teresa Grasa Jordán
Carlos Barboza Vargas.
Archivo Barboza Grasa.
Ver enlaces:
https://barbozagrasa.blogspot.com/2011/09/150-anos-de-la-llegada-del-ferrocarril.html
https://barbozagrasa.blogspot.com/2014/03/el-ferrocarril-de-gallur-sadaba-en-las.html
https://barbozagrasa.blogspot.com/2016/10/aurelio-grasa-en-heraldo-de-aragon.html
https://barbozagrasa.blogspot.com/search?q=grasa+canfranc
https://barbozagrasa.blogspot.com/2015/03/canfranc-el-oro-y-los-nazis-de-ramon.html?q=grasa+canfranc





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